Los exámenes de Cambridge para niños (Starters, Movers y Flyers) son una gran oportunidad para que los más pequeños se familiaricen con el proceso de evaluación de una forma divertida y sin presión.
Estos exámenes ayudan a los niños a ganar confianza, marcarse objetivos y ver su progreso reflejado en un reconocimiento internacional. Además, les preparan para futuros retos académicos.
Desde Starters hasta Flyers, cada nivel se adapta a la edad y conocimientos de los alumnos, reforzando sus habilidades de comprensión y expresión en inglés de manera gradual y positiva.
Prepararse para estos exámenes no solo mejora el inglés de los niños, sino que también les aporta una ventaja académica y personal.